“Con un rotundo respaldo del Congreso, Colombia marca un hito al aprobar el proyecto de ley que crea el programa nacional de esterilización de gatos y perros en el país: Esterilizar Salva”, expresó la senadora animalista Andrea Padilla, quien presenta esta ley
como la más importante, aprobada hasta ahora, para implementar una verdadera política de protección animal con recursos de la Nación.
¿Por qué es crucial esta ley? El incremento del 32% en la población de gatos y perros (11.034.761) entre 2019 y 2022, y los fenómenos de sufrimiento, maltrato y abandono (más de 3 millones de ellos sin hogar) subrayan la urgencia de controlar la natalidad de estas especies. Estas cifras se deben a la mala tenencia de animales de compañía, a la falta de controles en su comercialización y a las dinámicas reproductivas de ambas especies, pues en solo 5 años una gata puede producir hasta 28.812 crías y una perra hasta 5.000. Por eso el proyecto no solo crea el programa nacional de esterilización, sino que les ordena a los entes territoriales a educar a la ciudadanía y a promover la adopción.
Según la Organización Mundial para la Sanidad Animal, la esterilización es la medida más eficaz, estratégica y responsable para gestionar éticamente la natalidad de gatos y perros.
Características de programa. El Ministerio de Ambiente será el encargado de reglamentar el programa: metas, indicadores, protocolos, pliegos tipo, y de hacerle seguimiento. Este se ejecutará mediante puntos fijos y quirófanos móviles y les dará prioridad a los animales sin hogar, a los que se encuentren albergados en refugios y a los que pertenezcan a poblaciones
vulnerables. Además, ordena que los municipios y distritos, en coordinación con los departamentos, desarrollen campañas de tenencia responsable de animales de compañía y de educación sobre la importancia de esterilizarlos. El Ministerio tendrá un año para disponer de un medio de acceso digital en el cual reportará los avances del programa.
Financiamiento del programa. El programa será financiado en un 100% por la Nación para municipios de categoría 4, 5 y 6, y cofinanciado en un 50% para los municipios de categoría 2 y 3. Los distritos especiales y municipios de categoría 1 asumirán el 100% de los costos en sus territorios, según su capacidad presupuestal. Se estima que anualmente el programa podría costarle a la Nación unos $32.000 millones para esterilizar al 5% de la población de gatos y perros. Hoy los municipios tienen la obligación legal de hacer esterilizaciones, pero no cuentan con los recursos, especialmente los de categoría 6 que son 965, es decir, el 86% del país.
Reducción de costos en vacunación. Cada año el país invierte, en promedio, $26.500 millones en la compra de vacunas contra la rabia. Sin embargo, con el incremento exponencial de la población de perros y gatos la cobertura bajó de 67% a 55%, lo que genera un riesgo para la salud pública. Si el país quisiera llegar al 80% de vacunación (estándar internacional) debería invertir anualmente $40.000 millones de pesos. Y mientras la tasa de natalidad de animales siga creciendo sin control, la cobertura de vacunación antirrábica seguirá ampliando su brecha de déficit o tendrán que incrementarse, de manera exponencial, los recursos en vacunación antirrábica.
De acuerdo con la autora de la ley, “esta es la primera ley que le obliga a la Nación a destinar recursos para la protección de los gatos y perros, como una política de Estado.
La esterilización es la acción más urgente en el país, de cara a la mitigación del sufrimiento de los animales de compañía”.
Según la Sociedad Mundial para la Protección Animal, “la difícil condición de los animales de la calle es uno de los asuntos de bienestar animal más visibles en el mundo hoy”.